La idea de poseer una casa en la campiña japonesa tiene un atractivo único. Es un sueño de paisajes tranquilos, arquitectura tradicional y la oportunidad de conectar con un modo de vida diferente. Para muchos, el sueño es comprar un akiya-una casa vacía, a menudo encantadoramente antigua, a la espera de un nuevo capítulo. Lo mejor de todo es que los precios de estas casas pueden ser increíblemente bajoAlgunos incluso se regalan.
Pero para muchos extranjeros, este sueño suele empezar con una gran pregunta...
Can Extranjeros Realmente ¿Comprar una propiedad en Japón?
La respuesta es un rotundo sí. Japón es uno de los pocos países de Asia donde los extranjeros pueden comprarPuede comprar, vender y poseer terrenos y propiedades sin restricciones. Esto es así tanto si tiene visado japonés como si no, y no necesita ser residente. Puede adquirir una vivienda para uso personal, como segunda residencia o incluso para alquilarla. Los impuestos y los trámites legales son los mismos para todos, independientemente de la nacionalidad. De hecho, Sumica Corporation ha ayudado a varios extranjeros cumplen su sueño de poseer una vivienda en Japón.
Ahora que sabes que la puerta está abierta de par en par, la verdadera cuestión es cómo atravesarla. Pero, ¿cómo navegar por el proceso de principio a fin? El camino hacia comprar una akiya en Japón puede parecer complejo, pero lo hemos desglosado en tres fases claras para guiarle en cada paso del camino. Esta es tu hoja de ruta completa para convertir ese sueño en realidad.
Su hoja de ruta para comprar Akiya
Fase I: Búsqueda y decisión
La primera parte consiste en descubrir: encontrar una casa que te guste, conseguir la ayuda adecuada y tomar decisiones importantes y emocionantes. Puede parecer mucho, pero si se hace paso a paso, es totalmente manejable. Pongámonos manos a la obra.
Encontrar la propiedad adecuada para usted
La búsqueda es la parte más emocionante del viaje. Antes de devolver un hogar a la vida, hay que encontrarlo. Afortunadamente, la abundancia de recursos en línea ha hecho que descubrir akiya en Japón sea más fácil que nunca. El éxito es simplemente cuestión de saber dónde buscar.
Dónde buscar: Páginas web inmobiliarias y el "Banco Akiya
Para la mayoría de los compradores potenciales, la búsqueda empieza en Internet. Su búsqueda se centrará en dos recursos clave.
La primera es Principales portales inmobiliarios, que son los equivalentes japoneses de Zillow o Rightmove. Ofrecen un gran número de anuncios con potentes filtros y, aunque están principalmente en japonés, las modernas herramientas de traducción del navegador son sorprendentemente eficaces. Entre los líderes del sector figuran empresas dominantes como SUUMOgigantes de la industria como LIFULL HOME'Sy el fiable en casa.
El segundo recurso clave es el Banco Akiya (空き家バンク). Se trata de una herramienta única y valiosa. Un "banco akiya" no es una institución financiera, sino una base de datos de viviendas vacías gestionada directamente por los gobiernos municipales locales. Su objetivo es la revitalización de la comunidad, lo que significa que se pueden encontrar propiedades increíblemente asequibles -y a veces incluso gratuitas- que no aparecen en ningún otro sitio. Para encontrar uno, basta con buscar el nombre de una ciudad o prefectura que le interese, seguido del término "空き家バンク". Este sitio web agrega también listas de akiya de todo Japón.
Descifrar los planos japoneses
Al examinar los listados, tendrá que descifrar las abreviaturas estándar de los planos. Estas letras son sencillas y representan distintas estancias, como por ejemplo L para la sala de estar, D para el comedor, K para Cocina, y S para un pequeño Servicio o trastero.
Donde adquiere mayor fuerza es en combinación. El término LDK significa un espacio abierto que combina el salón, el comedor y la cocina, mientras que DK se refiere a un espacio combinado de comedor y cocina. El número al principio indica simplemente el número de dormitorios separados. Por tanto, un 3LDK es una vivienda con tres dormitorios además de una zona LDK diáfana. Es un sistema eficiente una vez que se conocen los fundamentos.
Ponerse en contacto con una agencia inmobiliaria favorable a los extranjeros
Una vez que tenga una lista de las propiedades que le interesan, es hora de que intervenga un profesional. Tratar de manejar el proceso de compra solo es extremadamente difícil, especialmente si no habla japonés con fluidez. Necesitará un agente inmobiliario autorizado.
La búsqueda es la parte más emocionante del viaje. Antes de devolver un hogar a la vida, hay que encontrarlo. Afortunadamente, la abundancia de recursos en línea ha hecho que descubrir akiya en Japón sea más fácil que nunca. El éxito es simplemente cuestión de saber dónde buscar.
Elegir un agente de confianza
Encontrar una agencia inmobiliaria en Japón que sea amigable con los extranjeros lo hará todo mucho más fácil. Busque agencias que mencionen que tienen personal que habla inglés o que han trabajado antes con compradores internacionales. Un buen agente es su guía, traductor y defensor, todo en uno. Es una buena idea hablar con varios agentes hasta encontrar uno con el que congenie.
Aquí es exactamente donde podemos ayudarle. En Corporación SumicaEstamos especializados en ofrecer asistencia integral a extranjeros. No somos meros agentes; somos sus socios durante todo el proceso, desde la búsqueda de la propiedad perfecta y la gestión de todos los trámites hasta la puesta en contacto con arquitectos y contratistas para la renovación. Nuestro objetivo es hacer que la compra de su akiya sea lo más sencilla y transparente posible.
La importancia de un diagnóstico de la propiedad
Antes de decidirse por una casa, su agente debe ayudarle a obtener un diagnóstico de la propiedad. Se trata de un conjunto de informes sobre el estado de la vivienda. Para una akiya antigua, esto es absolutamente imprescindible. Aunque no todas las comprobaciones son legalmente obligatorias en cada venta, sin duda debe preguntar por ellas:
- Integridad estructural: Especialmente su capacidad para resistir terremotos.
- Amianto: Si se utilizó en la construcción.
- Daños por plagas: Las termitas pueden ser un problema en las casas de madera más antiguas.
- Sistemas eléctricos y de fontanería: ¿Funcionan o necesitan una sustitución completa?
- Pintura con plomo: Una posibilidad en casas muy antiguas.
- Catastro: ¿Están los límites de la propiedad oficialmente marcados y claros?
Comisiones de intermediación
En Japón, la comisión que se paga al agente inmobiliario está fijada por ley. El máximo que puede pagar es 3% del precio de la vivienda + 60.000 yenes, más el impuesto sobre el consumo. Suele pagar esta comisión en dos partes: la mitad al firmar el contrato de compraventa y la otra mitad en el momento del cierre, cuando recibe las llaves.
Visitar la propiedad y tomar una decisión
Este es el momento en el que todo empieza a ser real. Ver una casa en persona es la única forma de saber realmente si es la adecuada para ti.
Visitas presenciales frente a visitas a distancia
Ver una casa en persona es siempre la mejor manera de saber si es la adecuada. Te haces una idea real del espacio, la luz, el barrio y el estado general de una forma que las fotos y los vídeos no pueden captar del todo. Si puedes planear un viaje a Japón para ver tus mejores opciones, es muy recomendable.
Sin embargo, para muchos compradores extranjeros esto no resulta práctico. En ese caso, la mejor opción es una visita guiada por vídeo en directo. Se trata de un proceso interactivo en el que un agente te guía por la casa a través de una videollamada (como FaceTime o Zoom). Para sacarle el máximo partido, debes hacer preguntas sobre la marcha y pedir ver cosas concretas: el estado de los techos para ver si tienen manchas de agua, el interior de los armarios y alacenas, lo bien que se abren y cierran las ventanas e incluso la presión del agua en el fregadero.
Enviar su "intención de compra
Cuando encuentres una casa que te guste, harás oficial tu interés presentando un documento de "intención de compra" (kounyuu moushikomisho). No es jurídicamente vinculante, pero demuestra al vendedor que vas en serio. Incluirá:
- Su precio de oferta.
- Cómo piensa pagar (al contado, en préstamo, etc.).
- Sus fechas preferidas para el contrato y la mudanza.
- Cualquier otra condición especial que pueda tener.
- Tiempo en el mercado: Si una casa lleva cinco o seis meses en venta sin venderse, probablemente el precio sea demasiado alto para lo que aguanta el mercado.
- Propiedades comparables: Si encuentra una casa similar en la misma zona que se haya vendido recientemente por menos, puede ser un punto sólido para su negociación.
Preguntas esenciales antes de comprometerse
Antes de pasar a la fase de oferta, es fundamental tener una idea clara de lo que se está comprando. Asegúrese de hacer preguntas concretas a su agente para evitar sorpresas posteriores. Por ejemplo, pregunte por los límites exactos de la propiedad, ya que en las zonas rurales pueden no estar claramente vallados. También debe preguntar si hay algún problema conocido en el historial de la propiedad, como grandes incendios, inundaciones u otros incidentes; los vendedores en Japón tienen la obligación de revelar estos "defectos psicológicos" si se les pregunta. Por último, pregunte por los costes anuales estimados, como el impuesto sobre activos fijos (Kotei Shisan Zei) y cualquier gasto de la comunidad local (jichikai-hi), para tener una idea completa de los gastos a largo plazo.
Fase II: Financiación y planificación de costes
Comprender y presupuestar el coste total
Una vez que has encontrado la casa que te gusta, la siguiente cuestión es el dinero. Averiguar el presupuesto es una parte fundamental del proceso, ya que el precio de etiqueta de una akiya suele ser sólo el punto de partida. Es importante tener una idea clara de todos los costes asociados antes de firmar ningún contrato.
La "regla 8%": Desglose de los gastos extraordinarios
Por regla general, los gastos adicionales pueden rondar los 6-8% del precio de compra del inmueble. Esta "regla de los 8%" incluye una lista de los gastos necesarios. Entre ellos están el Impuesto de Actos Jurídicos Documentados (inshi-zei) por el contrato de compraventa, el Impuesto de Adquisición de Bienes Inmuebles (fudousan shutoku-zei) recaudado una sola vez por la prefectura, y el Impuesto de Registro y Licencia (touroku menkyo-zei) para registrar legalmente su propiedad.
Además, su presupuesto debe incluir los honorarios de corretaje de su agente, las primas de los seguros esenciales contra incendios y terremotos, y los honorarios profesionales del escribano judicial (shihō shoshi) que se encarga de los trámites de registro.
Comprender el impuesto anual sobre bienes inmuebles
Más allá de estos gastos de compra únicos, también tendrá un impuesto anual continuo. El impuesto sobre bienes inmuebles en Japón para los extranjeros es exactamente el mismo que para los ciudadanos japoneses. Se denomina Impuesto sobre Activos Fijos (kotei shisan-zei) y se calcula en función del valor catastral de su propiedad y terreno. Su agente inmobiliario puede darle una estimación del importe anual de cualquier propiedad que esté considerando.
Garantizar la financiación
La financiación de su akiya es uno de los pasos más importantes, y el camino que tome depende en gran medida de su estatus de residencia en Japón. A continuación, hemos separado los consejos para los no residentes que viven en el extranjero y para los residentes extranjeros que viven en Japón.
Para compradores extranjeros: Transferencias directas
Para los compradores que viven fuera de Japón, el método estándar y más sencillo de compra es con dinero en efectivo, pagado a través de una transferencia bancaria internacional. Esto se debe a que, por lo general, los no residentes no pueden abrir una cuenta bancaria en Japón para depositar fondos para una transacción inmobiliaria. El proceso está bien establecido, pero requiere una planificación cuidadosa.
Los fondos se transfieren desde su banco en su país de origen directamente a una cuenta segura designada en Japón. Para su protección, rara vez se trata de la cuenta individual del vendedor. En su lugar, el dinero se suele depositar en una cuenta de garantía bloqueada gestionada por el escribano judicial o la agencia inmobiliaria que se ocupa de la venta hasta que se cumplan todas las condiciones del contrato. Por este motivo, es muy importante trabajar con un agencia de confianza como Sumica Corporation, asegurándose de que recibe facturas y recibos oficiales por cada pago.
El calendario es absolutamente fundamental. Su contrato inmobiliario tendrá plazos firmes tanto para el depósito inicial, o tetsukekin (手付金)y el saldo final. Como las transferencias internacionales pueden tardar varios días laborables en liquidarse, debe iniciarlas con suficiente antelación para no poner en peligro el acuerdo. También es aconsejable comparar los tipos de cambio y comisiones de su banco con los de un servicio especializado en transferencias de divisas, que a menudo pueden ahorrarle una cantidad significativa de dinero. Conserve siempre un recibo oficial de la transferencia como prueba del pago.
Para residentes en Japón: Explorar las opciones de préstamo
Para los extranjeros que viven en Japón, conseguir un préstamo hipotecario (jūtaku rōn - 住宅ローン) es una posibilidad, pero supone un reto y depende casi por completo de tu estatus de residencia.
El factor más importante para la mayoría de los bancos japoneses es si tienes la residencia permanente (永住権 - eijūken). Poseer un visado de RP abre las puertas a los mismos productos hipotecarios disponibles para los ciudadanos japoneses. Los bancos lo ven como un compromiso de residir en Japón a largo plazo, lo que te convierte en un prestatario de menor riesgo.
Si no tiene la residencia permanente, sus opciones son más limitadas, pero no imposibles. Sus posibilidades de aprobación aumentan significativamente si está casado con un ciudadano japonés o con un Residente Permanente que pueda actuar como avalista del préstamo. Además, algunas instituciones financieras específicas, como el Tokyo Star Bank, son conocidas por ser más flexibles y ofrecer productos de préstamo a quienes no tienen la Residencia Permanente y cumplen ciertos criterios de empleo e ingresos.
Independientemente de la situación de su visado, cualquier banco evaluará cuidadosamente su estabilidad financiera. Normalmente le exigirán que haya tenido un empleo estable y a tiempo completo en Japón durante al menos dos o tres años, con unos ingresos anuales constantes y un historial crediticio limpio.
Requisitos para obtener un préstamo
Si solicita un préstamo, prepárese para cumplir varias condiciones. Los prestamistas suelen exigirle que tenga entre 20 y 65 años y un trabajo estable a tiempo completo durante al menos dos o tres años. También tendrá que demostrar unos ingresos anuales mínimos, que suelen rondar los 3-5 millones de yenes, y es posible que necesite un cierto nivel de japonés para entender el contrato. Para la mayoría de los bancos japoneses, el factor más importante es tener Estatuto de residente permanente.
Fase III: Trámites y pasos finales
Preparar los documentos necesarios
Una vez elegido el inmueble y resuelta la financiación, se entra en la recta final. Esta fase se centra en las tareas legales y administrativas necesarias para que la casa sea oficialmente suya. Los documentos específicos que necesitas dependerán de tu estatus de residencia.
Lista de comprobación de documentos para residentes en Japón
Si vives en Japón con un visado válido (como el de trabajo, el de cónyuge o el de residencia permanente), tendrás que preparar lo siguiente:
- Tarjeta de Residencia (Zairyu Card): Su documento oficial de identidad japonés.
- Certificado de residencia (Juminhyo): Documento oficial de la oficina municipal que acredita su domicilio.
- Sello personal (Inkan o Hanko): En Japón se utiliza un sello personal registrado en lugar de la firma para los contratos oficiales. Puede hacerse uno de forma fácil y económica.
- Certificado de sello (Inkan Shomeisho): Documento de la oficina municipal que registra oficialmente su sello, demostrando que le pertenece.
Lista de comprobación de documentos para no residentes
Si compra desde fuera de Japón, no dispondrá de los documentos arriba indicados. En su lugar, tendrá que proporcionar equivalentes notariados de su país de origen:
- Pasaporte: Su pasaporte válido como identificación.
- Una declaración jurada: Se trata de una declaración jurada, firmada ante notario en su país de origen. Sirve como prueba oficial de su dirección e identidad, sustituyendo esencialmente al certificado de residencia japonés. Su agente o representante legal en Japón le facilitará la redacción exacta de este documento.
Registro de la propiedad y transmisión de la titularidad
Firmar un contrato no es el último paso; el cambio de titularidad debe inscribirse legalmente en el registro oficial de la administración. Este proceso crucial protege sus derechos como nuevo propietario.
El proceso de registro de la transferencia de propiedad
De este proceso legal se encarga un especialista llamado escribano judicial (shihō shoshi). Su trabajo consiste en gestionar todo el registro verificando todos los documentos, confirmando que se ha realizado el pago final y presentando la solicitud oficial a la Oficina de Asuntos Jurídicos para transferir el título de propiedad a su nombre. El día del cierre, te reunirás con el escribano, el vendedor y tu agente para firmar los papeles finales y, una vez completado el registro, la casa será legalmente tuya.
Cumplimiento de sus obligaciones legales de información
Hay un informe final importante que todos los compradores extranjeros deben hacer.
Informe de 20 días al Ministerio de Hacienda
En virtud de la Ley de Divisas y Comercio Exterior de Japón, todo no residente que adquiera bienes inmuebles en Japón debe notificar la adquisición al Ministro de Finanzas (a través del Banco de Japón). Debe hacerlo en los 20 días siguientes a la compra. Es un formulario sencillo que su agente o escribano judicial puede ayudarle a cumplimentar fácilmente.
Recibir las llaves y gestionar su nueva propiedad
Una vez completado el registro, hay que ocuparse de algunos asuntos finales al comenzar su nueva vida como propietario en Japón.
Recibir el título oficial de propiedad
Aproximadamente una o dos semanas después del cierre, el escribano judicial le proporcionará el Título de propiedad (kenrisho o touki shibetsu jouhou). Es la prueba legal de que usted es el propietario del inmueble. Es un documento increíblemente importante, así que asegúrate de guardarlo en un lugar seguro.
Nombramiento de un administrador fiscal
Si vive en el extranjero, tiene que nombrar a un "administrador fiscal" (nozei kanrinin). Puede ser un amigo, un familiar o un servicio profesional en Japón que se encargará de recibir las facturas del impuesto sobre bienes inmuebles y asegurarse de que se pagan en su nombre.
Declaración de la renta
Si su plan es alquilar su akiya, los ingresos que obtenga estarán sujetos al impuesto sobre la renta japonés. Deberá presentar una declaración anual de impuestos, y es muy recomendable contratar a un contable fiscal (zeirishi) para que se encargue de ello.
Planificación de la renovación de Akiya
Con las llaves en la mano, comienza el siguiente capítulo: devolver la vida a tu akiya. Tanto si necesita unos retoques estéticos como una renovación a gran escala, ésta es su oportunidad de convertir la propiedad en su visión personal. Navegar por esta etapa puede ser un proyecto en sí mismo, pero a menudo es una de las partes más gratificantes de toda la experiencia.
Con frecuencia Preguntado Preguntas
PREGUNTAS FRECUENTES
Sí, todo el proceso -incluida la selección de la propiedad, los contratos, el pago, las renovaciones y la gestión del alquiler- puede gestionarse completamente en línea. Ofrecemos traducciones al inglés y explicaciones basadas en Zoom.
Seleccionamos cuidadosamente propiedades estructuralmente sólidas y de alto rendimiento. También proponemos y ejecutamos con antelación las renovaciones necesarias, centrándonos en las propiedades que probablemente se revenderán bien en el futuro.
Los impuestos anuales sobre la propiedad suelen oscilar entre 30.000 y 80.000 yenes. Si la propiedad está vacía, solo tendrás que pagar los servicios básicos.